Temporada de uva de mesa chilena mostró aumento del volumen y renovado enfoque en calidad

Esta temporada mostró un dinamismo y adaptación de la industria frente a los desafíos y crecimiento en nuevos mercados. A pesar de enfrentar desafíos climáticos y una renovación de varietal más lenta que sus competidores.

La temporada 2023-2024 chilena de uva de mesa consigió exportar más de 64 millones de cajas de uvas frescas (528.795 toneladas), generando ingresos por encima de los USD$1.000 millones FOB. Este avance representa un incremento del 7% en volumen y del 13% en valor respecto a la campaña anterior. 

"Chile mantiene un liderazgo en cuanto a logística y comercialización. Contamos con un producto de mejor calidad. Más del 60% de la oferta está compuesta por variedades nuevas. Es probable que el próximo año se llegue a 70%, por tanto habrá más oferta para comercializar", señaló Isabel Quiroz, directora de iQonsulting.

Iván Marambio, presidente de Frutas de Chile, resalta la mejora en la calidad y el crecimiento en la producción y exportación de nuevas variedades de uvas de mesa, que alcanzaron los 39 millones de cajas. Esta estrategia ha mejorado la competitividad de Chile, especialmente en el mercado de Estados Unidos, beneficiándose además de la baja oferta de California y Perú debido a condiciones meteorológicas adversas. 

La temporada 2023-2024 tuvo un aumento global de 6% en los envíos de uva de mesa desde el hemisferio sur más México e India, alcanzando 2,2 millones de toneladas. 

Chile lidera las exportaciones con una participación del 24%, seguido por Perú y Sudáfrica, que también han experimentado crecimientos significativos.

Marambio agregó que la estrategia del recién creado Comité de Uva de Mesa para mejorar la competitividad del sector, en particular en su principal mercado de exportación, Estados Unidos, está dando sus frutos. “A todo esto se sumó también la caída de la oferta proveniente de California y Perú, debido a condiciones climáticas adversas que los afectaron más que a nuestro país”.

Dos variables ayudan a elevar los resultados de Chile: en primer lugar, una mejor logística y, en segundo lugar, precios estables en el mercado estadounidense, a pesar de la mayor oferta que llegó desde Chile a partir de la semana 14, agregó el presidente de los exportadores y productores frutícolas.

En tanto Quiroz explicó que si bien la renovación varietal de Chile ha sido más lenta que la de Perú y Sudáfrica, ahora la transición comienza a dar frutos.

Las principales variedades nuevas de uva chilena son Sweet Globe (blanca sin semillas) con una participación del 12%, Allison (roja sin semillas) con un 11% y Sweet Celebration (roja sin semillas) con un 10%. Las variedades que han mostrado un crecimiento exponencial esta última temporada han sido Sweet Globe, Autumn Crisp y Sweet Flavor, mientras que Timco y Cotton Candy con una disminución en participación.

Posición de Perú en este contexto

Perú, sigue liderando como proveedor de uvas blancas sin semillas, manteniendo el primer puesto en el mercado con una participación del 47%. 

Chile y Sudáfrica siguen en la competencia, destacando en las categorías de uvas rojas sin semillas y negras sin semillas, con Chile a la cabeza de ambas categorías.

La oferta de la variedad Red Globe continúa ajustándose a la disminución del consumo y los cambios en las preferencias del mercado, aunque aún mantiene un nicho importante.

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