Fruteros de Coquimbo deben cavar zanjas para evitar robo de sus frutos

Debido a la continuidad de robos de paltas, almendras y chirimoyas, los productores han tenido que recurrir a esta medida para salvaguardar sus cultivos. Han denunciado pero este delito persiste.

La inseguridad que están viviendo los palteros de Coquimbo, en la IV Región, de Chile,  ha llevado a los productores agricultores a tomar medidas urgentes para resguardarse del robo de sus cultivos de paltas, almendras y chirimoyas. 

Además de los cercos eléctricos, torres de vigilancia con guardias, están haciendo zanjas de más de tres metros de profundidad y 18 de kilómetros de extensión.

Los productores manifiestan que son bandas organizadas, de aproximadamente 10 personas, la cuales entran para robar rompiendo cercos y vulnerando cualquier tipo de seguridad, incluso utilizan drones para ver si hay guardias en las casetas de vigilancia o recorriendo los predios, con el fin de entrar con mayor facilidad.

Los agricultores calculan que por noche se roban alrededor de 20 y 30 sacos de 50 kilos cada uno, a pesar que existen guardias con turnos que pueden llegar a 40 funcionarios por área cultivada.

A la medida tomada de realizar zanjas, se suma la de plantar cercos de espino. Los productores que por temas de seguridad no quieren ser identificados, han realizado denuncias a Carabineros pero dicen que los delicuentes lamentablemente al otro día están nuevamente robando en los huertos.

El teniente Diego Ibarra, de la Oficina de Análisis de Carabineros de Coquimbo, señaló que "la importancia que tiene la denuncia, para nosotros como institución, es que nos mantiene alertas y nos permite focalizar los sectores que se han visto afectados por distintos tipos de delitos y problemáticas".