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Por Redacción , 1 de abril de 2024 | 17:38Extensión del plazo y cobertura de emergencia agrícola entre Atacama y Magallanes
Debido a la compleja situación de déficit hídrico, se prevé los próximos meses con precipitaciones bajo lo normal sumado al creciente fenómeno de La Niña. Hay 192 comunas cubiertas por esta declaración.
Ante la compleja situación de déficit hídrico que ha afectado a varias regiones entre Atacama y Magallanes, durante los últimos años, y en base al pronóstico de la Dirección Meteorológica de Chile, que prevé los próximos meses con precipitaciones bajo lo normal para la zona centro, sur y austral del país, que se suma a la probabilidad creciente del fenómeno de “La Niña” en invierno con posibles menos lluvias, el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, anunció hoy la extensión del plazo y cobertura de las declaraciones de Emergencia Agrícola para la zona entre Atacama y Magallanes.
De esta forma, tal como explicó Valenzuela, 192 comunas del país estarán cubiertas por esta declaración, que permitirá agilizar la entrega de ayudas y asesorías a los agricultores afectados. El anuncio lo realizó junto directivos de la Asociación de Municipios Rurales, autoridades del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP).
“Con esta medida el ministerio de Agricultura y sus servicios -aquí está el SAG, INDAP, CNR- puede redireccionar recursos para ir más rápido en la ayuda de los agricultores. A su vez, permite poder trabajar con los gobiernos regionales, a los que les pedimos proactividad y fondos convergentes con nosotros, así como también ocurre con un número importante de municipios que fortalecen y ayudan a la agricultura y a la seguridad alimentaria para poder trabajar de una manera concreta y focalizada”, explicó el secretario de Estado.
En el detalle, hasta el 30 de septiembre de este año estarán vigente las declaraciones de emergencia agrícolas en la región de Coquimbo y en las provincias de Petorca, San Antonio, San Felipe, Los Andes, Marga Marga y Valparaíso (con excepción del territorio insular) en la región de Valparaíso.
A esto se suma la ampliación de cobertura para la región de Atacama (Diego de Almagro, Chañaral, Tierra Amarilla, Copiapó, Alto del Carmen, Vallenar, Freirina y Huasco) y Valparaíso (provincia de Quillota: Hijuelas, La Calera, La Cruz, Nogales y Quillota). Además, se extiende la vigencia para la región Metropolitana (Provincia de Chacabuco: Lampa, Colina y Til Til); O’Higgins (Provincia de Cardenal Caro: La Estrella, Litueche, Marchigüe, Navidad, Paredones y Pichilemu); Ñuble (Provincia Diguillín: Bulnes, Chillán Viejo, Chillán, El Carmen, Pemuco, Pinto, Quillón, San Ignacio y Yungay); región del Biobío (todas sus comunas); región de La Araucanía (todas sus comunas); región de Los Lagos (todas sus comunas); región de Aysén (Coyhaique, Aysén, Lago Verde, Río Ibáñez, Chile Chico, Cochrane, Cisnes, Tortel, y O’Higgins de la región de Aysén) y región de Magallanes (todas sus comunas menos la Antártica).
Por su parte, el director nacional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), José Guajardo, señaló que “el fenómeno de la niña nos puede afectar porque hay posibilidades de que tengamos pocas precipitaciones y bastante calor y esto puede afectar la salud de los animales y de las plantas. En el ámbito pecuario, sobre todo en el norte, no habiendo agua, se pueden ver afectados los ganados caprinos del norte grande (…) esto puede generar también una exacerbación de las plagas y para eso es importante tener los recursos para evitar que haya un impacto en la productividad”.
En ese sentido, el subdirector nacional del Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP), Cesar Rodríguez, detalló que “en el INDAP se está realizando un trabajo en el que se van identificando aquellas medidas que puedan adaptar a los productores a hacer una agricultura adaptada a una menor cantidad de agua disponible. Por eso, queremos trabajar en la incorporación de elementos de sostenibilidad para aumentar la producción y para eso estamos trabajando con los municipios para asesorar técnicamente al proceso de estrés hídrico.